El agua es un recurso visible en el extenso patrimonio hídrico de nuestra localidad, donde los acuíferos forman parte del ecosistema natural de la zona. El esfuerzo de sus habitantes durante siglos permitió la construcción del amplio entramado de acequias y pozos que da a sus tierras fértiles una agricultura privilegiada, en su recorrido a lo largo del municipio se pueden observar parajes naturales de protección como la acequia de L’Illa y del Pou o antiguos motores de riego repletos de naturaleza, Esta ruta que recorre la totalidad del termino municipal pasa con lugares emblemáticos como la desembocadura del Belcaire en su itinerario natural o la fuente modernista y los antiguos depósitos subterráneos de agua en su zona urbana.